Categories: opinion

El futuro de Valery y Alejandro

A estas alturas del año los recuentos son inevitables: elecciones, proceso constituyente, inflación, el COVID, los retiros previsionales, una bola de nieve que arrastra a mujeres vulneradas, migrantes empobrecidos, adultos mayores abandonados, jóvenes excluidos de la educación, personas en situación de calle y, por supuesto, a niñas, niños y jóvenes pobres y vulnerados.

Como Valery, de 7 años; y Alejandro, de 9. Hace tres días, los dos dormían en una carpa al lado del terminal de buses en Antofagasta. Se conocieron en el albergue y saltan juntos en la cama elástica de un albergue en Antofagasta. “Mire mi dibujo”, pide Valery. “Acá es cuando nos encontraron los policías, yo levanté los brazos y mi mamá se desmayó en la tierra, había mucho frío y mi papá también se ahogaba, subimos un cerro de noche, me dio miedo y fue horrible”.

Como ella existen cerca de 900 mil niños y adolescentes que viven en situación de pobreza en Chile; 700 mil que no tienen una cama propia, una mesa para hacer sus tareas, porque el hacinamiento es su paisaje personal; 416.622 menores de 10 años, como Alejandro, que sufren de mal nutrición; 187 mil que estaban fuera del sistema escolar antes de la pandemia y cerca de 220 mil que deben trabajar para subsistir.

A su edad, Alejandro ha visto cosas que otros niños ni se imaginan. “Me puse nervioso cuando pasamos la trocha con linternas, por eso llevé de la mano a mi hermana chica, en el desierto hay muchos huecos donde caerse, entonces hay que saltar con las mochilas pesadas sin hacer ruido. Eso no me gustó, porque un señor se cayó en una zanja y no me dejaron ayudarlo”.

Es inaceptable que en nuestro país los derechos de miles de niños, niñas y adolescentes sean vulnerados por la pobreza. En Chile, sí podemos implementar un Piso de Protección Social que les permita un desarrollo pleno en educación, salud, vivienda y otros derechos básicos. Hoy es clave aspirar hacia una universalización de los servicios esenciales y asegurar un ingreso mínimo para todos los hogares con niños, niñas y adolescentes, para garantizar que todos tengan las mismas oportunidades de aprendizaje y desarrollo pleno.

¿Qué pasará mientras tanto? Valery y Alejandro seguirán saltando en la cama elástica. Los dos saben que la cosa en Chile no tiene muchas soluciones. O encuentran una casa bonita con patio, dicen, o ellos y sus familias se van caminando a otro país. Ninguna de las alternativas les pertenece.

Por Pedro Urrutia, Jefe Social Territorial de Hogar de Cristo

Recent Posts

Violencia contra profesores: Secuelas psicológicas de un fenómeno en alza en las aulas de Chile

El estudio "Docentes ante las violencias en las escuelas" presentado por el Colegio de Profesores…

10 horas ago

Uber lanza Teens: la solución de movilidad para familias con adolescentes en Antofagasta y Calama

Desde hoy, en las ciudades de Antofagasta y Calama estará disponible Uber Teens, una solución…

11 horas ago

Especialista de la UA reconoce la importancia del autocuidado en el trabajo

En el marco del Día Internacional de las y los Trabajadores, la Dra. Mónica Miranda,…

11 horas ago

Documental de la Universidad de Antofagasta será estrenado próximamente en Festival Santiago Wild 2024

La obra audiovisual “El nido de la golondrina” fue producida por la Red de Acción…

17 horas ago

Tasa de Desocupación regional anota un nuevo descenso y se ubica en 7,9%

De mayor a menor tasa de desocupación, las regiones de La Araucanía (9,7%), Metropolitana (9,6%)…

2 días ago

Iván el Campesino: Destacado Músico Antofagastino obtiene el Primer Lugar en Competencia Nacional de Armonicistas

· Artista local fue elegido como el mejor exponente del género mediante un jurado compuesto…

2 días ago