Las y los profesionales, coincidieron en que pedir ayuda no es un lujo, sino un acto de cuidado y responsabilidad, recordando que la salud mental debe ser tratada con la misma importancia que la salud física.
La iniciativa, desarrollada en el marco del programa de formación de especialistas en Psiquiatría Adultos de la Universidad de Antofagasta (UA), busca reducir la brecha de profesionales en la macrozona norte y aportar a la atención integral de pacientes en crisis de salud mental.
En el Hospital Regional de Antofagasta (HRA), un grupo de estudiantes del programa de formación de especialistas en Psiquiatría Adultos de la UA, está participando activamente en la atención de pacientes, acompañados por sus docentes y psiquiatras supervisores.
Esta experiencia clínica, además de ser parte esencial de su formación, representa un importante aporte a la red asistencial de salud mental en una región que enfrenta una alta demanda y una notoria escasez de especialistas.
La doctora Marcela Silva, psiquiatra del HRA y docente del programa, destacó que este proyecto nació en 2020 gracias a una alianza entre la Universidad de Antofagasta, el Servicio de Salud de Antofagasta y la entonces Gobernación Regional, con el propósito de revertir la brecha existente en la macrozona norte en materia de salud mental.
“La formación de psiquiatras en la Universidad de Antofagasta, surge por la necesidad urgente de contar con más profesionales capacitados para atender la creciente demanda. Actualmente estamos formando la sexta generación de becados, provenientes de distintas regiones del país, muchos de los cuales ya se encuentran aportando en la red pública”, señaló la doctora Silva.
El programa de especialización tiene una duración de tres años, en los que los futuros psiquiatras se forman de manera progresiva en distintas áreas: desde la atención hospitalaria de corta estadía, pasando por la salud mental comunitaria y ambulatoria, hasta rotaciones en psiquiatría infantil, adicciones y neurología, consolidando así una formación integral y multidisciplinaria.
La doctora Jahaira Saltos Medranda, jefa subrogante de la Unidad de Psiquiatría del HRA, subrayó la relevancia del apoyo que brindan las y los becados al servicio, comentando que “contamos con un alto nivel de demanda y una ocupación total de camas, tanto en adultos como en población infantil. La participación de los estudiantes es fundamental para reforzar la atención y acompañar a nuestros equipos clínicos.
La Dra. Saltos agregó que “las y los estudiantes de la especialidad reciben capacitación, se integran al trabajo diario y contribuyen directamente al bienestar de los pacientes. Para los futuros psiquiatras, la experiencia ha sido profundamente formativa”.
Fernando Sevilla Quezada, estudiante de primer año del programa de formación de especialistas en psiquiatría adultos de la UA, valoró el ambiente de aprendizaje y el compromiso del equipo docente.
“Pensé que la adaptación sería más difícil, pero el acompañamiento y el trabajo colaborativo han sido muy gratos. Eso ha favorecido mucho el proceso de aprendizaje y nos motiva a seguir creciendo en esta área”, señaló Fernando Sevilla.
En tanto, Javier Barra Moya, también residente de primer año del programa de formación de especialistas en psiquiatría adultos de la UA, enfatizó la importancia de esta especialización para la región.
“Durante mi formación como médico me di cuenta de la gran necesidad de especialistas en salud mental. La experiencia en el Hospital Regional ha sido enriquecedora; he podido aprender mucho en un entorno donde la salud mental tiene una relevancia enorme”, dijo Javier Barra.
Por su parte, la doctora Perina Bencina Campos, psiquiatra del Hospital Clínico de la Universidad de Antofagasta y docente del programa, destacó el valor de la alianza asistencial-docente.
“El Hospital Regional es un espacio clave para la formación. Aquí los futuros psiquiatras enfrentan casos complejos y aprenden de profesionales con gran trayectoria. Además, este trabajo conjunto refuerza el vínculo entre la universidad y el sistema público de salud, generando un impacto directo en la comunidad”, afirmó.
La doctora Bencina, señaló que la región enfrenta desafíos estructurales en salud mental: déficit de camas, falta de centros de control ambulatorio y la necesidad de crear una urgencia exclusivamente psiquiátrica.
“Estamos en un punto crítico, pero también con grandes oportunidades de avanzar. La migración, por ejemplo, es un factor de estrés importante en nuestra zona, y requiere una respuesta interdisciplinaria y humana”, puntualizó.
Finalmente, desde el ámbito académico, los profesionales recalcaron que “pedir ayuda no es un lujo, sino un acto de cuidado y responsabilidad”, recordando que la salud mental debe ser tratada con la misma importancia que la salud física.
La intervención de los estudiantes y docentes de Psiquiatría de la UA en el Hospital Regional representa justamente ese compromiso con una atención más cercana, oportuna y empática hacia quienes más lo necesitan.
Leave a Reply