Categories: sin categoría

La inclusión es buena sólo cuando las escuelas y la sociedad están preparadas

Por Stephanie Cuchacovich, Psicóloga y Directora del área de Salud Mental de Living Better (https://livingbetter.cl/)

Recientes episodios de crisis conductuales en colegios protagonizados por niños con Trastorno del Espectro Autista (TEA) han reavivado el debate sobre la inclusión escolar y la capacidad de las instituciones educativas para responder a las necesidades de estos estudiantes. La inclusión efectiva no solo implica el acceso a la educación regular, sino también garantizar un entorno estructurado y adaptado que favorezca su desarrollo integral.

En el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo, debemos destacar que si bien la Ley TEA y el Decreto N°67 de Adecuación Curricular establecen principios de inclusión, no contemplan capacitación obligatoria para el personal educativo ni asignación de recursos suficientes para su implementación efectiva. Esto es problemático, ya que el TEA es un espectro amplio que abarca desde individuos con altas habilidades hasta aquellos con necesidades significativas de apoyo, como dificultades en la comunicación verbal y la regulación emocional.

Para comprender este tema en profundidad, es esencial reconocer que el Trastorno del Espectro Autista (TEA) abarca una amplia diversidad de manifestaciones. Este espectro incluye desde personas con altos niveles de autonomía y habilidades cognitivas avanzadas hasta aquellas con dificultades significativas en la comunicación y la regulación emocional. Por ello, algunos expertos se refieren a ‘autismos’, enfatizando la necesidad de abordajes diferenciados según cada perfil neurocognitivo.

Los colegios de mayores recursos suelen recurrir a tutores sombra para proporcionar apoyo individualizado a los estudiantes con TEA, actuando como mediadores en la autorregulación y facilitadores del proceso de enseñanza-aprendizaje. Sin embargo, incluso esta media a veces es insuficiente ya que la falta de estrategias de apoyo y acompañamiento pueden resultar en un ambiente poco propicio para la inclusión efectiva de estos niños y niñas.

Para garantizar un modelo de inclusión equitativo, es esencial capacitar a toda la comunidad educativa, incluyendo docentes, asistentes, directivos y estudiantes. La sensibilización sobre neurodiversidad y el manejo de crisis conductuales, así como el diseño de ajustes razonables en el currículo, resultan fundamentales para evitar la sobrecarga sensorial y el desajuste emocional en estudiantes con TEA.

Además, la comunicación permanente y coordinada con las familias es clave para el seguimiento y acompañamiento de cada estudiante. La educación personalizada permite evaluar de manera continua las estrategias de apoyo y, en algunos casos, que se deben evaluar en forma individual y con cautela, se puede ajustar la jornada escolar para favorecer la regulación emocional y el desarrollo socioeducativo del estudiante. Estos cambios pueden ser transitorios hasta que los estudiantes con TEA estén preparados para extender su jornada escolar.

La inclusión no debe ser un concepto abstracto, sino una práctica basada en evidencia y adaptada a la diversidad del TEA. En algunos casos, podría ser necesario considerar entornos educativos especializados cuando la modalidad de educación regular no proporciona las condiciones adecuadas para el bienestar y aprendizaje del estudiante.

Es urgente que las autoridades asignen recursos adecuados y proporcionen herramientas claras a las instituciones educativas para que puedan tomar decisiones informadas. La heterogeneidad del espectro autista requiere un enfoque flexible, fundamentado en la ciencia y en el respeto por la individualidad de cada estudiante. Sin una preparación adecuada, se corre el riesgo de que la inclusión se convierta en un proceso fallido, perpetuando barreras en lugar de eliminarlas.

En Living Better trabajamos constantemente para capacitar a las comunidades educativas y garantizar que la inclusión se realice con responsabilidad y conocimiento. La inclusión es un derecho fundamental, pero también una responsabilidad compartida que exige compromiso, formación y recursos adecuados para que todos los niños y niñas con TEA puedan desarrollarse en un entorno educativo seguro y enriquecedor.

Share
Published by
Prensa

Recent Posts

CChC presentó Índice de Calidad de Vida Urbana (ICVU) 2024

- El estudio elaborado junto a la PUC analiza 6 dimensiones; en 3 de ellas…

11 horas ago

Copec y la Academia Chilena de la Lengua lanzan concurso literario para fomentar la escritura y la lectura a nivel nacional

La convocatoria, que estará abierta desde el 2 5 de abril hasta el 30 de…

15 horas ago

Alianza Mujer Atacameña refuerza su impacto comunitario al cumplir tres años

En una jornada llena de significados, se despidió al primer comité AMA, destacando su valioso…

16 horas ago

Antofagasta: Más de $21.660 millones de fondos municipales serán invertidos en seguridad y mejor calidad de vida

El alcalde de Antofagasta, Sacha Razmilic Burgos, presentó la cuenta pública municipal 2024 con una…

16 horas ago

Psiquiatras del HCUA advierten sobre los efectos del síndrome de burnout: una amenaza silenciosa en el entorno laboral

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el burnout es un fenómeno ocupacional que…

16 horas ago

Finalizó el Atacama Challenger 2025, en la nortina localidad de San Pedro de Atacama, coronándose campeones Eleuterio Ramírez y Aldama Silman

El entrenamiento tiene su premio y esto quedo de manifiesto en esta nueva versión del…

21 horas ago